Agrupamos la ropa por tipología, colores y nivel de suciedad. Cada agrupación tiene un programa de lavado automático específico. Cargamos la lavadora, seleccionamos el programa y esperamos la finalización del ciclo de lavado. Si disponemos de un sistema de dosificación automática de los químicos no tenemos que hacer nada más ya que en cada fase del lavado entrarán los químicos ade-cuados en su justa cantidad. Una vez finalizado el ciclo de lavado la ropa se seca bien en secadoras rotativas, túneles de secado o calandras si se trata de ropa plana.